7Wonders

Este fin de semana hemos comprado un juego de mesa nuevo para la asociación, 7Wonders y la verdad es que me ha gustado tanto que mi artículo he decidido hacerlo de este juego, y así de paso le damos variedad a la página.

7 Wonders es un juego de 2 a 7 jugadores, muy rápido de preparar y de poca duración, unos 20, 30 minutos. Además cuenta con unas reglas simples y muy fáciles de aprender, por lo que enseguida nos pondremos a jugar.

Los juegos de mesa pueden conllevar mucho caos cuando juegan muchas personas, pero con este juego no hace sino aumentar la diversión. Cada jugador tiene que tomar el papel de una gran civilización antigua y usar los recursos que va recolectando para construir su cuidad y su maravilla y así tener más puntos de victoria que sus rivales al final de la partida. Si os gustan juegos de PC como Age of Empires, Civilization o similares este juego de mesa lo disfrutareis a lo grande.

COMO SE JUEGA:

Como he dicho es muy sencillo y rápido de jugar, las pocas dudas se solucionan consultando rápidamente el manual, el cual tiene tan solo unas 4 páginas y dispone de grandes fotos aclarativas más que de extensos textos que aburren y hacen que no recordemos lo primero que hemos leído. Intentare explicarlas brevemente y describir una partida.

El juego se compone de tres Eras (fases) por lo que existen tres mazos de cartas, uno por Era. Primero se seleccionan las cartas necesarias para el número de jugadores en partida, esto es fácil puesto que las cartas que tengan un 4+ bajo ellas implican que debe haber al menos cuatro jugadores para usarlas, por lo que usaríamos si somos 4, todas las cartas de 4+ o menos y descartaríamos el resto de cartas. Se barajan en sus respectivos montones, salvo en el de la tercera era que añadiremos cartas de gremio. Cogeremos las que hay y elegiremos al azar tantas iguales al número de jugadores +2.  Estas son las cartas que más valor tendrán en el juego, ya que nos darán más puntos de victoria y el que sea al azar hace que el juego tenga más diversión.

Después se da al azar una maravilla y tres monedas a cada jugador, y se reparten las cartas de la primera era, debe haber 7 para cada jugador. Una vez repartidas las cartas, monedas y maravillas ya puede empezar la partida.  Cada jugador debe elegir entre tres opciones cada turno: Construir un edificio o recurso, usar una carta para desarrollar un nivel de su maravilla o descartar una carta a cambio de tres monedas. Esto se hace eligiendo una de las 7 cartas que tiene en mano. Una vez todos los jugadores han elegido, ponen boca abajo y en frente de ellos las cartas que van a usar y la revelan simultáneamente para que nadie cambie sus planes según lo que ha hecho el de al lado. Luego, cada jugador pasa sus otras seis cartas al jugador de su izquierda. Y así hasta que llega el último turno, el sexto, donde sólo quedaran dos cartas para elegir, una se usará, y la otra se descartará.

A continuación se compararán las cartas de poder militar que se tienen, los vecinos que se impongan sobre los demás obtendrán escudos de victoria y los derrotados fichas de derrota. Estas fichas se cuentan al final del juego como puntos positivos o negativos respectivamente, esto se repite al final de cada era pero con diferente puntuación. Por ejemplo una victoria militar en la 1ªera da 1 punto de victoria, mientras que en la 2ª da 3 puntos.

Luego se reparten las cartas de la segunda era, de nuevo 7 por jugador,  y se hace lo mismo, excepto que en esta era las cartas se pasan al jugador de la derecha.

En la última era, la III, se vuelven a pasar las cartas al jugador de la izquierda, y tras el recuento de poder militar, se pasa al recuento de puntos totales. La mayor diferencia en las cartas según la era no es solo la puntuación que darán los edificios, sino que si necesitamos recursos para construir mejor que los recolectemos en la 1ª era, pues cada vez serán más escasos, llegando a desaparecer en la 3ª era.

Esto nos obligara a tener que comerciar con nuestros vecinos, lo que le da un verdadero toque estratega al juego. Tan solo podremos comerciar con nuestros vecinos directos, los que tengamos a izquierda y derecha, por lo que si somos cuatro jugadores, habrá un jugador al que no podamos comprarle o venderle nada y esto puede dificultarnos las cosas, además a la hora de comprar tendremos que tener en cuenta a quien de nuestros vecinos nos interesa más.  Esto es algo que suena complicado, pero que realmente es muy sencillo y todo el mundo lo entiende tras jugar una sola partida.

Muchas cartas dan puntos al final de la partida por sí solas, otras te habrán ayudado a conseguir otras cartas y otras te darán puntos gracias a otras. Así que hay muchas formas de conseguir puntos, esto dependerá de tu estrategia, puede que quieras centrarte en lo militar, en lo cívico o lo científico entre otras opciones, tú decides hay varias opciones.

Lo gracioso de este juego es la interacción con los vecinos. Hay que estar atento a todo lo que construyen y hacen para que redunde en nuestro beneficio y pensar al mismo tiempo en lo que ellos necesitan o podrían necesitar de nuestra civilización. Necesitaremos su dinero para ganar y si no tenemos nada que les interese no vamos a ver ni una moneda.

Puede que gane el mejor, o al que han molestado menos, porque este juego es como en las guerras. Cuando dos países entran en conflicto, los neutrales que les venden recursos a ambos se ponen las botas. Así que hay que saber aprovecharse de esto, pero también tener cuidado, pues la suerte también la deciden las cartas, como la vida misma nunca sabes cómo te van a venir las cosas o que recursos puedes tener en tu nación.

A nosotros nos ha parecido un juego de lo más divertido, hemos estado todo el fin de semana con él y sigo con ganas de echarme otra partida, por lo que mi recomendación si queréis haceros con un juego en el que puedan participar varias personas y que sea fácil  de aprender y de partidas rápidas, no lo dudéis este puede ser vuestro juego.

Por: Herc